Las 10 mejores atracciones turísticas de Montreal
Desde vistas panorámicas de siglos de antigüedad hasta festivales que presentan a las mejores bandas del mundo moderno, Montreal es una ciudad moderna y clásica a la vez que ofrece todo menos aburrimiento.
Basílica de Notre-Dame
Cuando caminas por el barrio Old Port de Montreal, es difícil que te pierdas las dos grandes torres de la Basílica de Notre-Dame de Montreal que sobresalen en el horizonte. Si te impresionaste con el exterior, espera a que entres por esas puertas. Terminada en 1829, es la primera iglesia gótica estilo renacentista construida en Canadá y sus ventanas de vitrales y pinturas religiosas dejan a muchos de los visitantes realmente asombrados. Caminar por la Basílica es como caminar hacia atrás en la historia. El papa Juan Pablo II visitó estas paredes, en las cuales también se realizaron los funerales del Primer Ministro Pierre-Elliott Trudeau y la leyenda de hockey, Maurice Richard. La entrada a la Basílica de Notre-Dame incluye un tour guiado de 20 minutos con una presentación de su historia, arquitectura y arte. También se puede asistir a una misa o tomar un tour extendido para conocer la sacristía, las galerías y el baptisterio.
Old Montreal
Old Montreal es el nombre perfecto para este barrio ya que es el más antiguo de la ciudad y es donde se encuentra el sitio en donde Montreal se estableció por primera vez en 1642. Sus calles empedradas recuerdan a Europa, se pueden ver carrozas con caballos que llevan a las personas al laberinto de atracciones que ofrece y sin embargo, la gente que se reúne en Old Montreal son jóvenes y divertidos. Hay mucha gente que visita las vastas boutiques de moda local y los cafés. La gente se reúne en el área para caminar, andar en bici, tomar un bote para pasear en la zona costera (conocida como Old Port) durante el día y en la noche tomar algo de beber o cenar en los muchos restaurantes modernos. Y esto no solo ocurre en el verano. A finales de enero, miles de personas se ponen sus trajes de nieve y se reúnen en el puerto para el Igloofest, un festival de música electrónica al aire libre. Old Montreal es una mezcla increíble de lo nuevo y lo antiguo que no puedes dejar de ver.
Mount Royal
Mount Royal es una montaña justo en el corazón del centro de Montreal, la mayor parte dentro de un parque con el mismo nombre. Fue, de hecho, Frederick Law Olmstead, el diseñador de Central Park de Nueva York quien diseñó el Parque Mount Royal y los dos puntos sirven al mismo propósito: existir para ser un espacio exterior en la ciudad, en donde se reúnen las personas, conviven, pasan tiempo fuera, hacen algún deporte y mucho más. Sube al punto más alto y visita la cruz gigante mientras ves toda la ciudad de Montreal. O bien, haz tu visita un domingo para ser testigo de uno de los mayores atractivos de Mount Royal: los tam-tams. Los Tam-tams son reuniones semanales (si el clima así lo permite) de bateristas, bailarines, vendedores y mucho más. Es una enorme fiesta en el exterior y tú estás invitado.
Oratorio de St. Joseph’s de Mount Royal
Al pasear por Montreal, se puede ver un techo verde grande y redondo en lo alto que sobresale a la vista. Esta azotea pertenece al Oratorio de St. Joseph’s Oratory del Mount Royal, la iglesia más grande de Canadá y un destino popular para los locales y los turistas. A 97 metros de altura, este gran techo – el domo de la basílica del Oratorio – es la segunda más alta del mundo, sólo atrás de la Basílica de San Pedro en Roma. Sube las largas escaleras y disfruta de la espectacular vista de la ciudad antes de entrar a la iglesia. Toma un tour y visita la pequeña capilla original, así como la Basílica, los jardines y el museo, el cual muestra exhibiciones religiosas y artísticas.
Museo de Bellas Artes de Montreal
Ponte tu boina, rasúrate el bigote y visita el Museo de Bellas Artes de Montreal para ver algunas de las 41,000 obras de su colección. Fundado en 1860, el museo es el más visitado en Canadá y atrae a más de 1 millón de amantes del arte cada año. Este es un museo de arte en toda la extensión de la palabra, ya que en sus paredes alberga las bellas artes tradicionales, la música, la moda en el cine y el diseño. En un par de horas, te podrás encontrar un florero de vidrio antiguo, un cuadro de Rembrandt y muebles únicos modernos. También se presentan nuevas “exhibiciones temporales” que se unen a la colección principal, lo que significa que nunca tendrás la misma experiencia dos veces.
Sainte Catherine Street
Sainte Catherine Street (Rue Ste.-Catherine como la llaman localmente) es el barrio para hacer tus compras en Montreal. Ya sea que andes buscando diseñadores de alto nivel, cadenas de tiendas, boutiques locales o solo souvenirs, lo podrás encontrar en esta calle. Con nueve millas de longitud, Sainte Catherine Street cruza el centro de Montreal de este a oeste. Podrás caminarla por horas y encontrar siempre una experiencia diferente en cada esquina. Los restaurantes, bares y cafés perfilan la calle, lo cual lo hace muy accesible en autobús o metro. El Montreal Forum, una antigua casa de los canadienses legendarios de Montreal y el monumento principal de Place-des-Arts se encuentran en Sainte Catherine Street.
Visítala en el verano y sé testigo de cómo toma vida la calle ya que las banquetas se atiborran de terrazas.
La Ciudad Subterránea (The Underground City)
Ahora que ya disfrutaste de una de calles para hacer compras más grandes del país, es tiempo de que veas que más te ofrece esta ciudad. Montreal alberga algo que se llama “ciudad subterránea”. El RÉSO, su nombre oficial, es una red de aproximadamente 20 millas de caminos subterráneos y túneles que conectan a los centros comerciales, estaciones de metro y edificios. Los acceso a esta red están en la calle, en nueve hoteles principales y ocho estaciones de metro distintas, y tienes acceso a 2,000 tiendas, 17 museos, una arena de hockey, un cine, clubs nocturnos y un sin número de restaurantes y negocios. Ya sea que estés tratando de escapar de un día frío, o solo ames ir de compras o te guste explorar, te unirás a 500,000 personas que están tratando de llegar a algún sitio a través de la ciudad subterránea todos los días.
Place des Festivals
En el corazón del centro de Montreal hay un distrito de entretenimiento conocido como the Quartier des spectacles y la pieza central de ese distrito es Place des Festivals. La Plaza es básicamente una plaza pública creada para ser sede de los grandes festivales y grandes multitudes y sin duda se quedó con ese propósito. Just for Laughs, el festival de Jazz de Montreal y un gran número de eventos se realizan en este espacio para ofrecer espectáculos y conciertos todo el año. La fuente interactiva más grande en Canadá, con 235 chorros de agua, está en el centro de la plaza así como cuatro torres de luces gigantes y dos restaurantes con fachadas de vidrio. No importa en qué época del año visites Montreal, la Place des Festivals siempre tendrá algo que mostrarte y que valdrá la pena.
Space for Life (Espacio para la vida)
El Space for Life de Montreal (Espace Pour La Vie) es la colección de cuatro experimentos distintos: el Biodomo, el Jardín Botánico, el Insectarium y el Rio Tinto Alcan Planetarium. Este espacio esto en un solo día, pero es probable que quieras mejor apartar 2 días ya que hay mucho que ver.pretende reconectarnos con la naturaleza y nuestro lugar en el universo, todo en un lugar muy conveniente y emocionante. En solo un día, te puedes parar y oler cerca de 22,000 flores y plantas, comer el lunch junto a los pingüinos o el lince, adivinar y decir si algo es un palo o un insecto y luego sentarte y disfrutar de una proyección de 360 grados de las Auroras Boreales. Puedes hacer todo
Museo Pointe-à-Callière
¿Qué conveniente es que un museo de arqueología e historia esté en el mismo lugar donde nació Montreal? El Museo de Pointe-à-Callière Museum fue fundado en el cumpleaños número 350 de Montreal en 1992 y ahora funciona como un carrete de la historia de la ciudad que data del siglo 14. Con la ayuda de multimedia y de nuevas tecnologías, podrás ver cómo las culturas de las Primeras Naciones vivían, cómo las influencias británicas y francesas moldearon la evolución de la ciudad y cómo Montreal se convirtió en la ciudad que es hoy en día. Este museo es como un patio de juegos para los amantes de la historia con ruinas de los edificios de hace varios siglos, reliquias arqueológicas de los primeros colonizadores de la región e exhibiciones temporales de todo tipo de temas sobre Canadá.