A dónde viajar para las vacaciones de primavera en Canadá
Vacaciones de primavera: terminaron las clases, es hora de viajar. ¿A dónde? Canadá, por supuesto. Está cerca y es acogedor; pero exótico y totalmente diferente a la vez. Y lo conocemos lo suficiente como para que sea fácil y divertido para todos. Disfruta de una semana o dos de vacaciones con tus amigables vecinos del norte. Desde lo urbano a lo salvaje, del sol a la nieve; aquí tienes los mejores lugares para un viaje inolvidable.
Okanagan Valley, Columbia Británica (BC)
La primavera es muy bonita en el valle árido de Okanagan Valley, región vitivinícola top de Canadá, gracias al abundante sol y a sus suelos arenosos y secos. Cata vinos y recorre las casi 200 bodegas de la zona, muchas aclamadas internacionalmente. Por nada te pierdas la bodega elegante y moderna, construida en concreto, Okanagan Crush Pad en Summerland, las pioneras Tantalus Vineyards y el experto maridaje entre vinos y comidas en Ex Nihilio.
Camina, anda en bicicleta de montaña por lagos, granjas y viñedos a lo largo de las vías férreas abandonadas de Kettle Valley Railway y monta a caballo por las colinas; o súmale un fin de semana en Sundance Guest Ranch en Ashcroft, un rancho vacacional idílico, bordeado por 1 000 acres de campo abierto por recorrer. Considera una o dos noches en God’s Mountain Estate, un alojamiento ecléctico en medio de una viña que asoma en lo alto de los acantilados de Penticton. Un atractivo especial es saborear una copa de vino tinto Okanagan en el jacuzzi, contemplando el valle desde las alturas.
Montañas Laurentides, Quebec
Marzo es sinónimo de que la primavera está llegando a Quebec, en donde se producen tres cuartos del jarabe de maple de América del Norte. Los lugareños colocan grifos en los árboles y se arman cientos de cabañitas azucareras. Sucede en todas partes, incluso en las grandes ciudades; pero es muy pintoresco en las áreas rurales de las Laurentides.
Gente con ánimo festivo se reúne a comer manjares suculentos, bañados en espeso jarabe de maple delicioso; además de platos típicos como sopa de chícharos y jamón salado casero; sin dejar de mencionar la masa frita y los caramelos de maple, es decir, jarabe caliente derramado en la nieve y enrollado en palitos. Siempre acompañados de música tradicional, recorridos en pony y tractores y paseos por los bosques. ¡No te lo pierdas! Y mientras estés en Quebec, practica tu francés al comprar o comer con la elegancia de Montreal o ve a las zonas rurales para pasear en trineos de perros, pescar en el hielo, hacer esquí nórdico y un retiro en un spa.
Complejo de esquí y snowboard Sunshine Village, Alberta
Las Rocosas canadienses de Alberta tienen mucha nieve en primavera; además de gozar de días soleados y frescos. ¡Hola, esquiadores! Diríjanse a la bien llamada Sunshine Village, cerca de Calgary. Este gran complejo lo tiene todo y está a 20 minutos del inigualable poblado montañoso de Banff.
Esquía y pasea todo el día o prueba una de estas actividades: un paseo en trineo, patinaje sobre hielo, o caminatas con raquetas para nieve. Luego ve de compras, a los spas, a cenar, a tomar tragos, a bailar o descansar. O, simplemente relájate en las afamadas aguas termales.
Whitehorse, Yukón
El Territorio del Yukón es espectacular al final del invierno con cielos amplios donde la luz se viste con un brillo etéreo. Puedes avistar la vida silvestre, andar en trineos de perros, en motos de nieve o hacer esquí a campo traviesa. Yukón es famoso por su insuperable ciclismo de montaña y Boréale Explorers es el favorito en cuanto a servicios rústicos y lujosos cuando de ciclismo en la nieve y paseos guiados en bicicletas de llantas gordas se trata. Dora malvaviscos en las fogatas, relájate en las bañeras de hidromasaje y admira las auroras boreales.
Si deseas alejarte de allí, también puedes hacer campamento de invierno, pescar o pasear en avión por el Parque Nacional y Reserva Kluane. O, intenta una variedad de aventuras guiadas de medio día con base en las afueras del peculiar Whitehorse o del poblado con auge histórico de Dawson City. Es interesante explorar la cultura de los pueblos originarios o First Nations; además del pasado de la fiebre del oro.
Toronto, Ontario
Toronto, el centro de Canadá, es el lugar para visitar si buscas la sofisticación urbana y la cultura de las metrópolis. Esta gran ciudad es el lugar para ir de compras, sobre todo en el moderno vecindario de Bloor-Yorkville y en el distrito The Distillery District: admira arte, shows y museos, además de comer y beber de forma extraordinaria.
Presencia un evento deportivo en un estadio, viaja en ferry a las islas cercanas o disfrutas de música en vivo. También puede sumarle fácilmente un viaje a las Cataratas del Niágara. El único desafío será decidir qué puedes abarcar en una semana o dos.
Yellowknife, Territorios del Noroeste
Si estás en busca de algo espectacular, aventúrate a los Territorios del Noroeste: unos de los mejores lugares del mundo para ver las auroras boreales en plena danza. En las afueras de Yellowknife se encuentra un conjunto de tipis cálidos, cubiertos en pieles, con el calor de fogatas, denominado Aurora Village, diseñado, de forma especial, para ver las luces del norte. Los cielos claros y la baja humedad son sinónimos de que las auroras son visibles unas 200 noches al año.
Mientras estés allí, no te pierdas el castillo gigante de hielo de Yellowknife, la ciudad flotante del Gran Lago del Esclavo, las manadas de caribúes y la oportunidad de ver un iglú verdadero de cerca. Empaca tu abrigo.
Cualquiera sea el tipo de vacaciones de primavera que te estés imaginando, ya sea relax y descanso, juegos de invierno u ostentación urbana; las posibilidades predicen que Canadá tiene todo lo que sueñas hacer. ¿A dónde vamos después?