Tips para auténticos viajeros en las Rocosas Canadienses
Eres un viajero, no un turista. Pero el hecho de buscar experiencias únicas, secretos locales y explorar las rutas menos concurridas, no quiere decir que no quieras conocer la imponente belleza de sitios icónicos gracias a los cuales Canadá se ha hecho famoso. Las Rocosas Canadienses, en Alberta, son uno de los lugares más visitados y la prueba de fuego para todos aquellos viajeros que quieren sentir la calma de la naturaleza en un lugar concurrido.
Desde las increíbles aguas azules del lago Louise hasta los borregos cimarrones de Jasper, las Rocosas Canadienses están llenas de parques y paisajes que contemplar. De hecho, son tan dignas de admiración que más de cinco millones de personas las visitan cada año. ¡Cinco millones de personas! Es muchísima competencia si te propones tomar la mejor fotografía.
Aunque las Rocosas son sorprendentes durante todo el año, la mayoría las eligen en verano, cuando hay nieve en las cumbres pero no en el suelo. Si eliges visitarlas en temporada alta, las multitudes, las caravanas y las excursiones en autobús son inevitables. Cuando planifiques tu viaje al Parque nacional Banff y al Parque nacional Jasper, te recomendamos seguir los siguientes consejos.
“A quien madruga Dios le ayuda”
La mayoría de la gente duerme hasta tarde durante las vacaciones o contrata excursiones, con lo cual las primeras horas de la mañana suelen ser las mejores para evitar las multitudes. Si no te gusta levantarte temprano, otra alternativa es visitarlo al final del día. En verano, el sol no se pone hasta casi las 22:00, es decir que el día tiene muchas horas para explorar la naturaleza mientras otros están ocupados cenando o ya se han metido en la cama. Solo asegúrate de estar preparado, tanto a la mañana como a la noche, con linternas y ropa de abrigo; después de todo, la naturaleza puede ser impredecible.
¿Otro punto a favor de las exploraciones fuera de la hora pico? Los animales silvestres suelen salir a alimentarse en estos momentos, así que presta atención a los uapitíes, las ardillas, los osos y las ardillas rayadas.
Explora un nuevo sendero
En lugar de quedarte al lado del mirador más cercano al estacionamiento, busca un sendero que rodee uno de los hermosos lagos de la zona. En su mayoría, no son empinados y te apartan de la mayoría de las multitudes que bajan de su autobús, toman una foto y continúan su alegre recorrido. Por ejemplo, el sendero Moraine Lake Shoreline es un viaje de ida y vuelta de alrededor de 3 kilómetros que ofrece espectaculares vistas de las montañas que te rodean.
Emprende una verdadera caminata
Si ya has conquistado los senderos de los lagos y buscas un poco más de aventura, además de alejarte aún más del bullicio, prueba una caminata más desafiante. Los senderos vigorosos atraen a menos turistas, lo cual significa que viajeros como tú pueden vencer a las pronunciadas colinas y admirar paisajes incluso más impresionantes. Prueba el desfiladero de Johnston Canyon o el jardín natural Sunshine Meadows para tener una perspectiva distinta de la naturaleza canadiense.
No le temas al agua
¿Quieres avanzar con rapidez? ¡Renta una canoa! Si lo haces, podrás alejarte de la costa del lago (donde está todo el mundo) y descubrir rincones y recovecos en el lago Louise o el lago Moraine. Nunca olvidarás la experiencia de haber remado sobre agua de un color azul turquesa.
Ve más allá de la góndola
Sin dudas, la góndola de Banff ofrece vistas admirables, una genial cubierta en la cima de la montaña y acceso a senderos desde la cumbre de la montaña Sulphur, pero existen otros lugares desde los cuales admirar las vistas desde arriba. Conduce hasta Mt. Norquay en lugar de batallar con el gentío para encontrar un lugar en la telecabina. Aunque es un complejo de esquí durante el invierno, en los meses de verano, Mt. Norquay es excelente para acceder a una vista privada del hermoso valle que se extiende a sus pies. Además, hay algunas actividades de verano (como tomar una silla área, subir por escaleras y puentes colgantes o disfrutar de una comida relajada) que te mantendrán ocupado.
Té y ejercicio
No hay dudas de que los hoteles Fairmont, en Banff y Jasper, son impresionantes, tanto en lo arquitectónico como en cuanto a su popularidad. En lugar de disfrutar de un té vespertino en el Fairmont Chateau Lake Louise, camina hasta Lake Agnes Tea House. Recorre tan solo tres kilómetros de hermoso bosque a pie hasta el lago Agnes, donde encontrarás un edifico pintoresco, como una cabaña, que sirve té en un contexto panorámico. Bebe una taza de tu té favorito y ten por seguro que te has ganado el bocadillo con el que lo acompañes.
Evita los feriados
No nos referimos a cualquier feriado, sino a aquellos días festivos importantes en Canadá. Los fines de semana largos del verano implican que más personas se escapan a los parques rebosantes de naturaleza para relajarse. En Canadá, los fines de semana largos más importantes son el de mayo (el lunes anterior al 25 de mayo), el Día de Canadá (el 1 de julio), el de agosto (el primer lunes de agosto) y el Día del Trabajo (el primer fin de semana de septiembre). Si evitas estas fechas, por lo general tendrás menos competencia a la hora de estacionar o tomar fotografías. Te recomendamos que visites los parques a mediados de la semana para evitar a los aventureros del fin de semana.
Considera la temporada intermedia
Si estás dispuesto a olvidarte de la típica escapada de verano, explora estos populares parques en primavera y en otoño. Aunque puede que esté un poco más fresco (es probable que necesites una chaqueta), tendrás mucho más espacio para ti solo. Incluso, es posible que seas testigo de los últimos restos de nieve en el suelo en primavera, o de las primeras nevadas a finales del otoño, lo cual constituye una experiencia todavía más singular.
Los puntos turísticos son populares por un motivo, pero estos trucos harán que tu experiencia por las Rocosas Canadienses sea todavía más especial.
Motívate
